10 tips imprescindibles para tener tu propio espacio verde

1) Asoleamiento:

Observá qué tipo de iluminación natural tiene. Es importante determinar si hay sol de mañana, de tarde o durante todo el día. Ese dato te permitirá seleccionar las plantas más adecuadas para tu espacio verde.

 

 

 

2) Dimensiones:
Si bien los m2 no son un impedimento para tener un espacio verde, sí son un condicionante, ya que a la hora de hacer el planteo paisajístico lo ideal es respetar la siguiente proporción: un 60 % para el césped y un 40 % para las plantas.

 

 

3) Uso:
Para diseñar un espacio verde, primero debes pensar cuál será el uso que vas a darle y quiénes lo usarán. Debes tener claro si será un espacio de juegos para niños chicos, si allí tendrán acceso las  mascotas de la casa, si harás actividades recreativas o deportivas o si  simplemente será un espacio para fines sociales o contemplativo. Es imprescindible que el diseño sea funcional para cubrir tus necesidades y aprovechar al máximo sus posibilidades.

 

 

4) Arquitectura:
La arquitectura de la casa no es un detalle menor y debe estar en sintonía con el diseño del jardín, así como también el estilo y los materiales que vayas a incluir.

 

5) Accesos:
El planteo de los accesos para recorrer el jardín también debe ser considerado, en especial si hay sectores a los que se vaya a acceder para determinadas actividades: tanto una parrilla, como un lavadero o un cuarto de herramientas tendrán requerimientos diferentes.

 

6) El paisaje prestado:
Las vistas de las casas vecinas también suman. A veces aportan belleza con las copas de sus árboles o follaje. En otras ocasiones es recomendable disimular las vistas vecinas porque no son muy ornamentales.

 

 

7) El riego:
Resulta uno de los condicionantes más importantes. Es imprescindible determinar si será automático, manual o si quedará librado a la naturaleza, con su frecuencia de lluvias. Esto determinará que tipo de plantas poner. Más allá de las preferencias, la tendencia es optar cada vez por opciones sustentables, es decir, plantas nativas de bajos requerimientos hídricos, para cuidar el recurso natural más importante que tenemos: ” el agua”.  Por eso resulta imprescindible la responsabilidad a la hora de regar.

 

8) Las plantas:
Una vez que tengas definido todos los tips previos, estarás en condiciones de seleccionar las plantas para tu jardín. Y no olvides que tendrán que adaptarse a las condiciones que tengas para ofrecerles, con sus necesidades y requerimientos.

 

9) El planteo
Siempre será necesario que tengas un boceto la idea de lo que te gustaría incluir en tu espacio verde. No es necesario que sea un plano profesional, pero sí ayudará mucho que tengas un croquis con las medidas del lugar, para que puedas ubicar en el espacio aquello que hayas imaginado.

 

10) El “Tip de Oro”: el suelo
Conocer el tipo de suelo del que te ahorrará mucho dinero, porque no todas las plantas sobreviven bajo las mismas condiciones y requerimientos. Conocer el PH es importante, puesto que hay suelos ácidos y suelos alcalinos. Los suelos pueden ser arenosos, arcillosos o francos. Estos últimos suelos son ideales por que están en proporciones óptimas, ya que se los considera ideales para el cultivo.
Si tu suelo es arenoso (es decir, muy poroso) podrás elegir plantas de requerimientos hídricos más bajos, como Lavandas, Cosmos, Suculentas, Cactáceas, Moras, Romero, Salvias, Iris, Sedum, etc.
Si tu suelo es arcilloso (cuando llueve o después del riego se encharca fácilmente) primero sería recomendable mejorar el drenaje. En ese caso, las plantas que podrías elegir son: Dalias, Calas, Helechos, Alocasias, Papiros, etc, que viven mejor en esa situación (claro que también tendrás que considerar el asoleamiento).

 

La recomendación que nunca deberías es olvidar es que “un jardín está vivo” y depende de vos.

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