Desde el peine para bigote al tocadiscos en el que ponía música o los manuscritos de puño y letra donde escribió algunas de sus canciones y muchos objetos más, serán parte parte de un lote de más de 1.500 objetos de Freddie Mercury que saldrán a subasta este miércoles en Londres, en coincidencia con el nacimiento del artista, quien este martes hubiera cumplido 77 años.
Los artículos fueron retirados de la mansión en la que Mercury vivió desde 1980 hasta 1991 (año en el que falleció, a causa de las complicaciones que le produjo el HIV). Ahora salen a subasta por decisión de Mary Austin, quien tuvo una relación amorosa de seis años con el cantante y luego fue su amiga íntima.
La mujer heredó su casa de 28 habitaciones y 25 millones de dólares y decidió donar una parte de las ganancias de la venta a dos organizaciones benéficas: el Mercury Phoenix Trust, fundado en honor al vocalista por sus compañeros Brian May y Roger Taylor de Queen, junto a su manager Jim Beach, y la Elton John Aids Foundation, que lucha contra el HIV.
“Mary cuidó la colección y se ocupó de todo”, contó el director senior de Sotheby’s David Macdonald, quien curó la exposición y supervisa la subasta, que se concretará en la sede de Londres desde el miércoles y hasta el 11 de septiembre.
Entre los objetos se destacan los borradores de composiciones como “We Are the Champions”, “Don’t Stop Me Now”, “Somebody To Love”, “Killer Queen” y “Bohemian Rhapsody”, con un precio base de 1.500.000 dólares.
El souvenir más caro de la subasta es el piano negro de media cola Yamaha G2 Baby Grand, que el cantante cuidaba con dedicación: no permitía que nadie fumaran cerca, ni que le apoyaran objetos. Mercury sentía una conexión creativa irremplazable con el instrumento, que está valuado en casi cuatro millones de dólares.
“Freddie Mercury, una superestrella del rock, era, lejos de los escenarios, un coleccionista muy culto. A través de seis subastas, Sotheby’s refleja el caleidoscópico mundo de estilo y calidad de Freddie Mercury, que abarca arte, moda, instrumentos musicales, documentos personales, posesiones y fotografías, muebles y joyas, acumulados durante 50 años”, destaca el comunicado de la casa de subastas.
Varios de estos artículos reflejan el costado público del cantante mientras que otros permiten descubrir sus intereses privados, así como su sentido del humor. Hay un peine de bigote de Tiffany y está también la capa y la corona que llevó durante la última gira de la banda, “God Save The Queen”, en 1986.
Mercury fue además un gran coleccionista de arte, faceta que se refleja en el lote a partir de obras de Henri Matisse, Utagawa Hiroshige, Salvador Dalí y Pablo Picasso, que salen a remate junto a figuras ornamentales cubiertas en diamantes o bañadas en oro de Cartier, así como muebles de origen japonés, país del que se enamoró en su primera visita en 1975.
Entre los objetos más pequeños se encuentran gafas de sol, un kit de costura, un tarro de galletas y figuras felinas, que responden a la pasión de Mercury por los gatos.
“Ha sido un proceso de colaboración increíble en todas las etapas, por supuesto con Mary Austin, pero también con algunas de las personas con las que colaboró en la confección de trajes y con muchos de los amigos de Freddie, que han tenido la amabilidad de compartir sus propios recuerdos de piezas de la colección. Y ese proceso de arqueología -de desvelar las capas de historia que rodean a cada objeto- aún continúa. Ahora que la exposición está abierta y todos los lotes están disponibles en línea, cada día aprendemos más de las personas que le conocieron y tienen sus propias historias que contar”, explicita Sotheby’s en su comunicado.
