Dos galerías realizan una “exposición cruzada” para potenciar el arte nacional
Smart Gallery de Buenos Aires y The White Lodge de Córdoba compartirán sus obras entre mayo y julio de 2021.
A raíz de los cambios que trajo aparejados la pandemia de coronavirus, distintas actividades han visto modificado su normal funcionamiento y el arte no es la excepción. Atentos a la nueva normalidad, para aprender a generar nuevas redes y formatos de trabajo conjunto, dos galerías realizarán un intercambio conjunto de obras hasta julio de este año.
En este escenario de nuevos esquemas de funcionamiento y para crear nuevos vínculos de trabajo, los artistas representados por The White Lodge en Córdoba traerán sus obras a Smart Gallery Buenos Aires, y viceversa. Este intercambio conjunto estará coordinado por los curadores de esos dos espacios, Dolores de Argentina y Andrés Sobrino.
“Nos aliamos para desarrollar un programa de exposiciones conjunto, con el fin de visibilizar y potenciar la red de vínculos que se generan alrededor de los proyectos de las galerías. Nuestro objetivo es unir esfuerzos para seguir generando espacios de diálogo y difusión en torno al arte contemporáneo, entendiendo la necesidad de unirnos para generar un mayor aporte a la comunidad desde lo cultural”, expresaron los organizadores de esta “exposición cruzada”.
Aquellas personas que visiten Smart Gallery BA, ubicada en la avenida Alvear, del barrio porteño de Recoleta, podrán contemplar obras de Elian Chali, Dolores Cáceres, Pablo Peisino, Manuel Coll, Lucía Von Sprecher, Santiago Viale, Melquidades Magliano, Gustavo di Mario, Ignacio Fanti, Gerardo Rpetto, Ramiro Chaves, Luciana Martínez, Claudia Santanera, Renato Custodio, Andrés Felipe Castaño, Alejandro García Contreras.
Por su parte, quienes se acerquen a The White Lodge, ubicado en la avenida Emilio Olmos 15 Piso 4 N de la ciudad de Córdoba, podrán admirar las obras de Andrés Sobrino, Hernán Salamanco, Julián Prebisch, Natalia Cacchiarelli, Hernán Paganini, Verónica Romano, Valería Maculán, Juan Stoppani & Jean Yves Legavre.
FUENTE: LA NACION